jueves, 31 de mayo de 2012

ÍTACA


Cuando emprendas el viaje hacia Ítaca

ruega que el camino sea largo,

lleno de aventuras, lleno de descubrimientos.

A Lestrigones, a Cíclopes,

al colérico Poseidón – no temas:

nunca hallarás tales seres en tu camino,

nunca mientras altos sean tus pensamientos,

mientras una extraña emoción

estimule tu alma y tu cuerpo.

A Lestrigones, Cíclopes,

al fiero Poseidón nunca encontrarás

a menos que en tu alma los lleves dentro,

a menos que tu alma los ponga ante ti.


Ruega que el camino sea largo.


Que sean muchas las mañanas de verano en que,

con gran placer y alegría,

entres en puertos desconocidos;

podrías detenerte en los mercados de Fenicia

y comprar hermosas cosas,

coral y nácar, ámbar y ébano,

toda clase de perfumes sensuales...

adquiere tantos como puedas;

podrías visitar muchas ciudades egipcias

y no dejar de aprender de sus sabios.

Que siempre Ítaca esté en tus pensamientos.

Llegar ahí es tu destino.

Pero nunca apresures el viaje.

Es preferible que dure años,

que seas viejo cuando alcances la isla,

rico con todo lo que habrás ganado en el camino,

sin esperar que sea Ítaca la que te haga rico.

Ítaca te dio un maravilloso viaje.

Sin ella no habrías partido.

Pero ya no tiene más que darte.


Y si la encuentras pobre, no creas que Ítaca te ha engañado.


Sabio como te has hecho, tan pleno de experiencia,

habrás entendido lo que significan las Ítacas.




Konstantino Kavafis.


Alejandría, 1863

Atenas, 1933.

Este poema es uno de mis favoritos de los muchísimos poetas que conozco. Lo repito, lo releo, lo reenvío una y otra vez. Cíclopes, Lestrigones y el fiero Poseidón han pasado temporadas en mi alma. De vez en cuando regresan, pero sus visitas son mucho más espaciadas. Ya no se alojan permanentemente conmigo. No sé por qué... Tal vez ya no le resulte cómodo vivir en mí y prefieren otra alma más receptiva. De vez en cuando vuelven. Claro, donde a uno lo tratan bien, intenta volver ... Sin embargo, estoy algo cansada de jugar a Odiseo versión femenina. Ya mi viaje es demasiado largo. No sé cuánto pero aproximadamente unos ... 20 años. Fue el tiempo que Odiseo demoró en arribar a Ítaca. A pesar de que tejo, de que tengo una paciencia digna de Penélope, no tengo los pretendientes que me presionan. Sí tengo su fidelidad, pero ante todo, esa fidelidad es a mí misma. Ser fiel a uno mismo es el sustento de cualquier otra fidelidad que pueda andar por ahí. Yo también tengo mi espíritu aventurero... Me gusta involucrarme en distintos viajes, no tanto físicos (No hay un Agamenón que neceside de mi fecundidad en recursos), pero hago siempre el mejor y más interesante de los viajes: el viaje interior. Viajo dentro de mí, y compruebo cuánto he cambiado, -para bien- algunos aspectos; por otro lado, me conmueve saber que sigo intacta en otros, como el primer día: eso me dice que tengo personalidad. Bien... muy bien. Por último, veo paisajes interiores que no me gustan... que he luchado toda mi vida por mejorar, y no lo he logrado. Es frustrante. Sin embargo, Ítaca sigue en mis pensamientos más altos. Y, naturalmente, es mi destino. Mientras aliente aquí en esta tierra, seguiré buscando mi Ítaca. Ella estará donde mi corazón esté.

2 comentarios:

  1. Que lindo posteo....me hace mucho sentido este poema, el viaje a Itaca simbolizado por el viaje hacia el interior del conocimiento al encuentro de las propias verdades.

    No deja de sorprenderme en este poema, simple en verbo...pero tremendamente profundo, el como su autor advierte que la sabiduría no se encuentra en ningún lugar fuera de uno, ese encuentro se efectúa cuando estamos preparados internamente para aventurarnos a el.

    Me quedo pensando en como muchas veces nos generamos expectativas de cambio tan irrealistas, tan omnipotentes, tal es el caso de cuando buscamos incansablemente afuera...lo que se encuentra tan cerca, tan dentro de uno.

    Un abrazo

    Paola
    Paola Sábado, 27 Enero 2007 15:17

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  2. Me gustaria leer de nuevo el poema "Sin par borracho Anton". No estoy muy segura del escritor, pero alguien comento que era de Kostantino, pudiera usted ayudarme.

    Muchas gracias por su tiempo.
    Rosalia V.V.
    Rosalia Van Vliet Miércoles, 16 Mayo 2007 19:30

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